- Enrolla el apio en papel de aluminio hasta que esté completamente cubierto. Haz que tu envoltura de aluminio esté lo más hermética posible y mételo en la nevera.
- Al conservar el apio herméticamente conservará el equilibrio de la humedad y conservará el apio fresco.
- Si lo vas a consumir en crudo, sácalo de la nevera, y refréscalo con agua y hielo un rato.
El arte de aprovechar toda una planta de apio, sin tirar nada, es darle diferentes usos a cada parte:
- Las hojas tiernas agregadas a una ensalada verde le dan un toque especial.
- Las más duras y grandes, las exteriores, saborirazarán un caldo.
- Las pencas interiores, tiernas y curvas se pueden servir pj: rellenas de queso azul y mantequilla.
- Las exteriores planas, picadas y al caldo o como base, junto con ajo y cebolla, para algún arroz.